SUPERGA-NADORAS Y EMPODERADAS
POR: @lavidaentenis





En pleno periodo entreguerras, los materiales escaseaban y por ello, el binomio lona+caucho vulcanizado fue la fórmula de éxito de Walter Martiny; en 1925 nació la más legendaria de las referencias, los Superga 2570 que se convirtieron en imprescindibles en las canchas de tenis, democratizando el deporte blanco no solo por su precio asequible, sino por su adaptabilidad para los y las deportistas que seguían luchando por darle la importancia que merecía el tenis femenino. No tardaron en ser la bandera del calzado deportivo made in Italy.
Fuerza Productiva
Después de la Segunda Guerra Mundial, muchas plantas de producción que habían cesado sus operaciones durante el combate bélico, reabrieron sus puertas; entre ellas, la de Superga, en Turín que les dio la bienvenida a las manos femeninas; en 1960, la fábrica empleaba a 1380 personas, siendo las mujeres la mayoría de su nómina.
Carrera contra el machismo
En 1967, inscrita con un nombre cifrado, la estadounidense Kathrine Switzer les abrió a las mujeres el camino hacia las pruebas atléticas de fondo, que hasta entonces eran merced de los atletas masculinos. Fue en Boston 1967, cuando completó la prueba reina del running en la que no estaba permitida la participación de mujeres. Forcejeando con un oficial de policía que la identificó entre los corredores, Switzer es LA IMAGEN de la reivindicación de la mujer en el deporte; y su número de dorsal, el 261 es el símbolo atlético de la igualdad de género y del empoderamiento femenino deportivo.
Revolución femenina ¡en sneakers!
A mediados de los años setentas, los tenis seguían su camino como herramientas sociopolíticas femeninas, mientras que las mujeres más influyentes de la época los asumían a ellos como símbolos de estatus y aliados del glamur. Las celebridades no atletas, pero sí réferis del estilo como Farrah Fawcett, fueron de las primeras en sacar a sus zapatillas fuera de las pistas de running. Tal fue el poder político adquirido por las suelas de caucho vulcanizado como aliadas de la revolución femenina que en 1967, una polémica actriz, activista, modelo y política apodada ‘Cicciolina’ fue imagen de la mítica marca Superga, convirtiéndose en un referente de la liberación y el poder femenino.
Con nombres propios
Si bien las referencias de calzado deportivo inspiradas y bautizadas como grandes atletas femeninas son muy pocas (la primera llegó en 1995, al paso de la ex basquetbolista Sheryl Swoopes, seguida por la también estrella del baloncesto Ellena Delle Donne en 2016), las alianzas de marcas con astros del estilo son numerosas; una de las más sonadas y poderosas fue la de la leyenda viva del estilo Alexa Chung con Superga, quien contagiándole a la tradición italiana de los 2570 su elegancia brittish, la funcionalidad neoyorkina y el chic parisino que la han convertido en la eterna it girl, puso ‘de cabeza’ a la industria del calzado deportivo al ir contra la corriente excesiva de los chunky sneakers y de los tenis ultra tecnológicos, conservando la sencilla ecuación de Superga: capellada del tenis clásico, suela blanca y caucho vulcanizado.